El dicho dice que "de una boda, sale otra". Ahora lo podemos ampliar a "de una egoblogger, sale otra"
Volde ha decidido otorgarle una sección en el blog a su hija, dice, que porque llevaba mucho tiempo pidiéndoselo. Se ve que el paripé de reportaje a lo Beckhams en Hola.com no fue suficiente y decide meterla por la puerta grande, en el candelero. Esperemos que siga siendo igual de permisiva cuando la niña crezca y vaya pidiéndole otras cositas...
A raíz de esto me planteo varias preguntas. ¿Se ha abierto la veda? ¿Si escriben comentarios negativos en los post se los leerá a su hija? ¿Está utilizando a la niña para incrementar las visitas a su blog? ¿Se está lucrando con ello? ¿En algún momento ha pensado en los posibles riesgos que conlleva exponer a su hija? ¿Si esto lo hubiese hecho otra egoblogger con su hij@ no sería Volde la primera en criticarlo en Twitter utilizando su famoso #llegandoafindemes?
Personalmente, estoy en contra de la sobre exposición que hacen muchas egobloggers de sus hijos en las redes, aunque también soy de la opinión que la inconsciencia e irresponsabilidad de los progenitores no nos da derecho a hablar de menores en según que términos. Y si, ya sé que son ellos quienes los exponen. Pero que ellos actúen de esa manera no quiere decir que yo también tenga que hacerlo. Es decir, sí criticaré el comportamiento, pero no al menor. Dudo que los hijos sean conscientes del uso y consecuencias de su imagen por parte de sus padres.
Recuerdo cuando Volde recibió críticas por tener la niña cuenta en Instagram, que rauda y veloz y haciendo gala de su típica altanería, respondió que ella supervisaba la cuenta y que además la tenía privada. Se ve que la privacidad está demodé. Pero ella, que nadie lo dude, es muuuuy madre. Es tan madre que tiene el poder de catalogar a otras madres. Como cuando a una chica que le hizo una crítica a través de Twitter decidió bautizarla de "medio madre" solo por el simple hecho de que su hijo era adoptado. Si, ese el nivel de la señora...
No me voy a meter en la educación que recibe mini Volde. Pero a esa edad que ya de por sí, se tiene un pavazo considerable, inculcarle ya desde pequeña ese gusto por el halago constante,porque te valoren por como vistes, por lo mona que sales cuando posas en las fotos, por esa colección tan enorme de deportivas que tiene... Da un poco de miedo.
El otro día a la entrada del supermercado me encontré una señora con muletas paseando a un chihuahua. El perrillo se desvió 5 milímetros de su lado y ante tal agravio la señora decidió darle una hostia (nada suave) con la muleta al perro. La mujer se me quedó mirando con una sonrisa en la cara como buscando cierta complicidad en mí, a la vez que exclamaba: Uy es que eeeees... A lo que le contesté. El perro no sé como será pero usted deja mucho que desear por pegarle. Al instante la señora cambió su rostro sonriente por la de descendiente de Satanás y me contesto: Uy, ya ves, el perro es mío y puedo hacer con el lo que quiera. Y se fue.
Mi batallita, que prometo que es totalmente verídica, resume perfectamente,(obviando la violencia) la mentalidad de las madres con sus hijos. Son mios y puedo hacer con ellos lo que quiera. Puedo publicar fotos y vídeos de cualquier momento de su vida, da igual que sea en el parque, que en la bañera, que comiendo, que en la playa, que llorando en su primer día de cole... Ahora sí, poooobre del que no diga que mi niño es el más guapo. ¡¡Que yo soy muy madre!! Porque para defender a sus hijos son muy talibanas pero para protegerlos ya son más de mano abierta.
Me resistía mucho a hacer este tipo de post con niños de por medio porque ya sé en que pueden derivar los comentarios. De hecho, no he querido hacerlo de ninguna mamiblogger o instamami o como carajo se hagan llamar, en primer lugar porque una vez que procrean me aburren soberamente y y en segundo lugar, por los términos que se pueden usar para referirse a los menores. Por eso antes de que empiece la tertulia os pido un poco de control con el tema.
¡ Que prosiga la tertulia !